Este martes fue la primera jornada en el Congreso sobre el proyecto. La sesión estuvo marcada por cruces entre oposición y oficialismo.

Pese a que el portavoz presidencial, Manuel Adorni, defendió en varias comparecencias el lema “se escuchan sugerencias, pero no se negocia”, el Ejecutivo argentino admite que la denominada ley ómnibus, proyecto estrella del Gobierno de Javier Milei, podría sufrir cambios.

Este martes se celebró la primera jornada de debate en el Congreso de la Nación sobre el proyecto de Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, más conocida como ley ómnibus por los 664 artículos que contiene.

La sesión, a la que acudieron por parte del Ejecutivo el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona; el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, y el procurador del Tesoro, Rodolfo Barra, estuvo marcada por los cruces entre oposición y oficialismo y por la afirmación —hecha por uno de ellos— de que el período de emergencia pública, planteado hasta fines de 2025, podría acortarse un año. Rodríguez Chirillo, uno de los “arquitectos” del megaproyecto —junto al expresidente del Banco Central (2015-2018) Federico Sturzenegger—, admitió esa posibilidad en su comparecencia ante la comisión conjunta.

“Nos sugerían que fuera de un año, más uno de prórroga, algo que estamos considerando para la versión final”, admitió el funcionario, quien, no obstante, defendió la necesidad de facultades legislativas para que el Ejecutivo pueda “achicar” la Administración pública “por la dimensión en la que se encuentra”.

Frente a esa versión, el polémico Barra —quien, con pasado filonazi, tuvo que dimitir de sus cargos públicos en 1996 en el Gobierno del peronista Carlos Menem (1989-1999) ante el rechazo de la comunidad judía— afirmó que ante la “crisis económica, no habrá Constitución vigente” para justificar la aprobación de reformas que pretenden desregular la economía del país.

Gobierno presente… en parte

Una de las principales reclamaciones hechas por la oposición es que los ministros del gabinete deben comparecer para explicar todos los aspectos de la denominada ley ómnibus.

A ese respecto, para este miércoles —día en que se tratarán, entre otros asuntos, la reforma electoral, la economía y el medioambiente—, está anunciada la presencia en comisión de los ministros de Interior, Guillermo Francos, y de Seguridad, Patricia Bullrich, pero no del titular del Palacio de Hacienda, aunque sí de su equipo.”Pedimos que vengan todos los ministros. Tiene que venir el jefe de Gabinete [Nicolás Posse], lo tienen que traer. En su rol es el que refrenda cualquier decreto delegado y tiene que venir el ministro [de Economía] Luis Caputo”, exigió el jefe del bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez.

 

Por su parte, la diputada del Frente de Izquierda de los Trabajadores (FIT) y excandidata a la Presidencia, Myriam Bregman, afirmó que los pocos plenarios dispuestos son “formas antidemocráticas que avasallan derechos”.

“¿Por qué solamente tres comisiones donde se garantizan la mayoría? Hemos presentado una impugnación formal y debió ser girada a, al menos, 30 comisiones esta ley ómnibus”, afirmó.

Ley contra la “decadencia” de Argentina

Entre las justificaciones para defender este proyecto, la más enfervorizada fue la hecha este martes en su habitual rueda de prensa por el portavoz presidencial, Manuel Adorni, quien culpó a la oposición y al “ruido” en torno a la denominada ‘ley ómnibus’ de la subida de los últimos días en el mercado cambiario.

“Los rumores sobre desacuerdos sobre la ley generaron que los dólares financieros salten de los 900 a los 1200, en números redondos. Nosotros hacemos nuestra parte y necesitamos que la política haga su parte”, señaló el vocero en la Casa Rosada tras concluir la reunión del gabinete de ministros, primero tras la mudanza de Milei a la Quinta de Olivos, desde donde teletrabajará buena parte de la semana.

El Ejecutivo está convencido de que está en “el camino para salir” de la actual situación “de decadencia” que vive Argentina y, por ello, pide al Poder Legislativo que apruebe el proyecto de ley, según afirmó el portavoz.

El Gobierno quiere que esta ley, que plantea cambios profundos en ámbitos como el económico, sanitario, judicial o político, esté aprobada antes de finalizar enero.

La Libertad Avanza (LLA), formación de ultraderecha que lidera Milei, carece de suficientes representantes propios en el Congreso y sus posibles aliados no alcanzan para ganar a la oposición, que puede empantanar sus reformas.