Uno de los policías recluidos en el lugar estaba preso por un homicidio cometido en diciembre.
Las autoridades de la cárcel de Mercedes trasladaron al sector Admisión a un grupo de cuatro presos, tras constatar que en el lugar donde estaban recluidos se intentaba abrir un boquete.
Según informa el medio local Agesor, el deterioro se constató en un área del penal donde están alojados expolicías que cometieron delitos, quienes permanecen separados del resto de la población carcelaria.
La crónica detalla que ese lugar, un presidio de seguridad media, no debería alojar a criminales como uno de los que allí estaba, en referencia al fernandino Santiago Alpanda Piazzoli, ex oficial de policía preso por homicidio y negociación con drogas.
La irregularidad se constató durante el pasado fin de semana, cuando el personal del centro penitenciario comprobó que junto a la banderola de esa celda estaban haciendo un boquete. De culminar la tarea, los presos habrían estado en condiciones de remover la protección de la banderola y hacer espacio suficiente para salir. De momento se desconoce si contaban con un plan de fuga o cómplices fuera del presidio.