En los grupos del Partido Nacional intercambiaron conjeturas acerca de la mentira de la exmilitante sobre Orsi.
Para muchos integrantes del Partido Nacional, el Directorio blanco debería haber sancionado antes a la militante Romina Celeste Papasso. Legisladores y dirigentes políticos consideran que, desde lo sucedido frente a la Intendencia de Montevideo (IM), cuando Papasso escupió a una funcionaria municipal, a la exnacionalista se la debería haber apartado de filas blancas.
Luego vino todo lo del caso del exsenador Gustavo Penadés y la credibilidad de Papasso aumentó, haciendo que los argumentos para echarla del partido fueran escasos.
Sin embargo, con la confesión de Paula Díaz, la mujer trans que denunció falsamente a Yamandú Orsi y señaló a Papasso como la artífice del ataque contra el precandidato frenteamplista, los blancos volvieron a apuntar contra ella.
“Compañeros, mañana el Directorio se va a reunir para ver qué hace con el tema de Romina Celeste. Alguna medida seguramente tomemos”, dice un audio de WhatsApp que envió el presidente de los nacionalistas, Pablo Iturralde, el pasado domingo, en medio de una catarata de mensajes que había en varios grupos de dirigentes y legisladores.
Otra fuente política resumió a Montevideo Portal que los grupos de chats entre blancos “arden”, y no paran de sacar hasta ahora conjeturas acerca de qué llevó a Papasso a hacer una acusación falsa e intentar orquestar en la Justicia una situación sin correlación con la realidad. “Es distópico todo”, indicó el mismo informante.