La operación de limpieza de Montevideo ya se está implementando con 312 efectivos militares y esto “molesta bastante” a ADEOM, principalmente por el uso del dinero destinado a la contratación de los soldados.

El secretario general de la Asociación de Empleados y Obreros Municipales (ADEOM), Facundo Cladera, dijo a Montevideo Portal que la participación del Ejército Nacional no está justificada porque la ciudad no se encuentra en estado de emergencia. También criticó que la Intendencia contrate a empresa privadas y organizaciones no gubernamentales.

Por otro lado, Cladera cuestionó los gastos implementados en este operativo, cuando “la Intendencia dice que no tiene recursos propios porque todavía no tiene el presupuesto y los nuevos camiones van a venir recién el año que viene”. La comuna “está tratando de encubrir un déficit brutal que veníamos denunciando”, agregó.

ADEOM se reunirá el próximo lunes 4 de enero para poner en cuestión las negociaciones sobre el convenio salarial para el período, pues las propuestas de la Intendencia no son las esperadas por la asociación. Por esta causa, realizarán un paro a partir de las 13:30.

Ya comenzó la limpieza

312 efectivos del Ejército Nacional comenzaron a recolectar la basura acumulada en unos 4.000 contenedores y sus alrededores este jueves, a pedido de la Intendencia.

Los soldados trabajarán en seis cuadrillas, cada una integrada por 26 soldados y un camión para facilitar la tarea. Actualmente están trabajando en los municipios A, D, F y G, que son los más afectados por la acumulación de basura.

La Intendencia de Montevideo es la encargada de supervisar las tareas de limpieza, al mando del director de Limpieza Néstor Campal y el coronel Jorge Fernández. También es responsable de suministrar los materiales necesarios a los militares como palas, bolsas, tapabocas y guantes.

Intendencia de Canelones firmó acuerdo con ADEOM

El problema de la basura no afecta solo a la capital, y en la mañana del jueves 31 la Intendencia de Canelones firmó un acuerdo con ADEOM, que durará dos años, para poner fin al conflicto.

El convenio incluye un ajuste general de salarios semestral y la instalación de comisiones de trabajo bipartitas para analizar las condiciones de la labor, la presupuestación, la carrera funcional y los asensos, además de racionalizar los gastos fijos, informa un comunicado de la Intendencia.

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