Ya cubrieron la demanda interna y este martes entregaron 400 barbijos para los efectivos que trabajan en la calle.
Cuando este viernes se diagnosticaron los primeros cuatro casos de coronavirus en Uruguay, se supo que dos de los infectados eran salteños. Atendiendo esta situación y la falta de tapabocas a la venta en los comercios de la ciudad, la subdirectora técnica de la Unidad 20 de reclusión de Salto, Avelina Borda, propuso que los reclusos produzcan este elemento de protección para cubrir la demanda interna de la unidad.
La iniciativa tomó impulso en el taller de costura que se dicta hace años en la cárcel en convenio con Inefop y con el Sindicato Único de la Aguja (SUA), por lo que el domingo cinco presos comenzaron a confeccionar barbijos.
Según informó el Ministerio del Interior en un comunicado, visto el resultado positivo de esta tarea, se les encargó a los presos seguir elaborando tapabocas para el personal policial que se encuentra prestando servicio en las calles. Este martes, el trabajo culminó con la entrega de 400 barbijos. A su vez, este fin de semana seguirán confeccionando para cubrir parte de la demanda de ASSE en Salto.
Actualmente trabajan en dos turnos de cinco personas a cargo de la tallerista del SUA Analía Esteves. Los materiales fueron proporcionados por la Sub Dirección Nacional Administrativa en el caso de los destinados al INR y en los otros casos por las instituciones que participan.
La directora de la Unidad, María de los Ángeles Machado, manifestó que la idea es que “mientras dure la epidemia se pueda seguir contribuyendo con las organizaciones que trabajan en la calle”. Además, aclaró que los internos no perciben retribución económica por esta tarea, pero que lo hacen con buena disposición, ya que son conscientes que están colaborando con el cuidado de la sociedad.