Este viernes se llevará a cabo una Asamblea General Extraordinaria, para tratar si se acepta la jugosa oferta realizada por Nike o si se renueva con Puma.
Este viernes se realizará una Asamblea General Extraordinaria, en la que se va a analizar una nueva oferta, realizada por la empresa Nike, para vestir a la selección uruguaya, .
El contrato que tiene Puma con la Celeste finaliza el próximo 31 de diciembre. Puma ya planteó una oferta para extender el contrato, que en principio conformaba a todas las partes, pero ahora apareció una nueva propuesta de Nike que es cuatro veces más alta (24 millones de dólares por siete años) y que le ofrece otros servicios: ropa deportiva para todos las disciplinas que dependen de la AUF y elementos de última tecnología para la práctica deportiva, entre las más importantes. Además, ofrece un porcentaje de las regalías por la venta de productos relaciones con la selección.
El Consejo Ejecutivo encabezado por Wilmar Valdez entiende que se trata de una oferta que no puede rechazarse, pero la palabra la tendrá las instituciones. “Esta es una decisión que trasciende al Ejecutivo. Nosotros no vamos a ir en contra de lo que decidan los clubes”, expresó a Ovación el vicepresidente de la AUF, Rafael Fernández.
¿Cómo llegó a la AUF esta propuesta? El integrante del Ejecutivo lo explicó. “Esto llegó a través de los jugadores de la selección y por supuesto que tiene el apoyo de ellos y del cuerpo técnico”.
DUDAS
Por más que la oferta es muy ventajosa con respecto a la de Puma, hay dudas de que se apruebe el acuerdo con Nike. Esta es la explicación:
Los derechos de la camiseta de Uruguay pertenecen hasta el 31 de diciembre de este año a Tenfield, que llegó a un acuerdo con Puma. El 1° de enero la AUF recupera esos derechos, pero hace un tiempo las tres partes vienen negociando la renovación. En este posible acuerdo Tenfield tendría participación porcentual, pero quedaría afuera si se arregla con Nike. Y este es un problema.
El dinero que ingresa por la venta de la camiseta de Uruguay se reparte en un 50% para el proceso selección (serían al menos 12 millones de dólares) y el resto entre las instituciones.
Según los dineros manejados, cada institución obtendría por año unos US$ 100.000 por el acuerdo con Nike. Si bien es una cifra sumamente superior a la que obtendría por el arreglo con Puma, las instituciones evalúan la conveniencia de continuar con la marca actual, pues supondría mantener en el negocio a Tenfield y a su vez como aliado para ir a golpearle la puerta cuando necesitan dinero. Si, por el contrario, la empresa propiedad de Francisco Casal, Enzo Francescoli y Nelson Gutiérrez queda excluida del negocio con la selección, sus puertas pueden cerrarse.
Entonces, más que por una cuestión de dinero, la decisión se basará en una estrategia a futuro.
Lo concreto es que el tema debería definirse hoy, porque Nike puso plazos y si no se cumplen, retirará su oferta. El Ejecutivo tiene claro una cosa: un eventual acuerdo con Nike asegurará el proceso de selecciones por varios años.