Una voluntaria de SOCOBIOMA veló durante la noche por la seguridad del animalito, y este parece haberlo entendido.

En las últimas horas, la aparición de un joven ejemplar de elefante marino en la Playa Ramírez llamó la atención de vecinos y medios de comunicación.

Expertos consultados explicaron de inmediato que, si bien este tipo de apariciones no son cosa de todos los días, tampoco resultan excepcionales.

Tras evaluar al animal informaron que se trata de un cachorro ya destetado, que probablemente fue alejado de su familia por las corrientes. Constatado el buen estado de salud del mamífero, se pidió a la población que simplemente se lo dejara reponer fuerzas en paz, y que una vez que haga esto, el animalito se marchará nadando en busca de los suyos.

En procura de proteger al pinnípedo, se dispuso un perímetro de seguridad y se solicitó a quienes paseen por la playa que se abstengan de aproximarse demasiado, y que mantengan también alejadas a sus mascotas.

Mariana Soto, voluntaria de la Sociedad para la Conservación de la Biodiversidad de Maldonado, arribó ayer en la tarde a la playa montevideana para evaluar en persona la situación, y tuvo la responsable generosidad de pasar la noche en la playa para protegerlo.

Tal como se aprecia en las imágenes, el elefante comprendió rápidamente que Mariana no representaba una amenaza y se acostumbró a su presencia, buscando incluso su compañía.

“El elefante en determinado momento fue, se dio un baño y entendió que el mejor lugar era descansar a su lado”, publicaron desde SOCOBIOMA.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *