El gobernante ordenó retirarlo de una plaza y luego lo cortó. Al no poder reparar el daño, lo rellenó con masilla.

Un fiscal en Paraguay acusó y solicitó se ordene prisión preventiva para el gobernador del departamento de Presidente Hayes (oeste), Nicolás de Jesús Cartamán Torres, por el presunto daño causado a un cañón usado durante la guerra de la Triple Alianza (1864-1870), que es considerado patrimonio cultural.

En un comunicado, el Ministerio Público indicó que el fiscal de la unidad penal nº 3 de la ciudad de Villa Hayes, Alexis Takahashi, imputó al funcionario por supuestos “daños a cosas de interés común”, previsto en el Código Penal, y por presunta transgresión a la Ley de Protección de Patrimonio Cultural.

En ese contexto, pidió al juez de garantías que “dicte prisión preventiva” contra el gobernador, bajo el argumento de que uno de los hechos punibles “se configura como crimen por la importancia del perjuicio causado a un patrimonio cultural histórico del país”.

Además, la imputación deja latente el peligro “de fuga y obstrucción” al tratarse de una autoridad departamental.

La nota relata que el mandatario, acompañado de otras personas y sin autorización de la Secretaría Nacional de Cultura (SNC), al parecer ordenó el pasado 2 de julio el retiro de uno de los cañones ubicados en la explanada de la costanera de Villa Hayes —capital de Presidente Hayes— y su traslado hasta la gobernación, donde presuntamente se cortó parcialmente la recámara o parte inferior y la culata del arma.

“Debido a la anchura del hierro, no se logró cerrar el corte realizado, por lo que se cubrió el agujero con masilla y luego se repintó en su totalidad”, añadió el Ministerio Público.

El diario Última Hora hizo eco de una denuncia formulada en junio pasado por el concejal de Villa Hayes Arnaldo Tono Sosa, quien advirtió sobre la posibilidad de que se buscara oro en la pieza de artillería que, según esa versión, data de 1825.

Informes oficiales indican que el cañón fue usado en la batería de Angostura durante la guerra de la Triple Alianza, en la que Paraguay perdió cerca de 300.000 de sus habitantes, según los cálculos de los historiadores, al enfrentarse con Argentina, Brasil y Uruguay.