El precandidato contó que habló con Sanguinetti, Talvi, Lacalle y Delgado, pero que no conversó con sus rivales sobre la fórmula colorada.

El precandidato colorado Andrés Ojeda dijo que “ojalá” estas sean las últimas elecciones internas no obligatorias, porque “es increíble que en el Uruguay, donde es obligatorio votar en la facultad, en el BPS [Banco de Previsión Social]”, no lo sea al “votar presidente”.

“Es un contrasentido total. O todo obligatorio, o todo voluntario. En un país con una tradición de obligatoriedad enorme, que elegir presidente no sea obligatorio, a mí no me entra en la cabeza”, dijo en rueda de prensa en su búnker.

“Hasta el día de hoy, no sé cómo llegamos hasta acá con esto así. En la medida de que los propios encuestadores te dicen que la elección fuera obligatoria, el resultado es uno y determinado, y puede cambiar radicalmente en la medida que no lo es, con más razón. A la gente le imponés la obligación de votar en octubre un menú que no eligió, en virtud de la voluntariedad”, agregó.

Ojeda afirmó que aún no habló con ninguno de los otros precandidatos colorados sobre la fórmula de cara a octubre. “Por ahora me he mantenido en lo mismo que hemos hablado todos estos días; cuando tengamos números, charlamos”, dijo.

“Creo que las conversaciones sobre eventuales fórmulas entre precandidatos van a ocurrir en la medida que tengamos algún número que nos dé algún resultado sobre el cual podamos empezar a edificar algún tipo de acuerdo”, sostuvo.

A pesar de no haber hablado con sus rivales, sí dijo que lo llamaron Ernesto Talvi, Julio María Sanguinetti, Álvaro Delgado y el presidente, Luis Lacalle Pou: “Llamadas de cordialidad, buena onda y saludos. Aprovecho para agradecerlas todas”.